Crónica | Cádiz CF 1 – Real Betis Balompié 2: La fé, los resucitados y la pasión

Crónica | Cádiz CF 1 – Real Betis Balompié 2: La fé, los resucitados y la pasión

El Real Betis Balompié consiguió un triunfo importante en el Nuevo Mirandilla tras vencer a un combativo Cádiz tras completar una remontada de fé. Esa fé que ya está inundando las calles de la bendita Sevilla y de muchos rincones de Andalucia. ¿Qué es la fé? Díficil pregunta. No vamos ahora a entrar a definir este concepto porque para cada uno tendrá su significado.

La demostración de fé que hizo ayer el Real Betis se tratar de no caer, recomponerse y de creer en el triunfo. El de confiar en sus posibilidades y no desistir hasta conseguirlo. El gol de Iván Alejo parecía convertir el paso de los verdiblancos en una penitencia muy dura, pero Manuel Pellegrini, ingeniero y capataz de esta Hermandad verdiblanca, sabe como llevar a su cuadrilla.

Cambió a algunos de sus hombres, y la entrada de Joaquín, Tello y Borja Iglesias resultaron fundamentales para darle ritmo y brío al Betis. Curioso que casi a las puertas donde la fé sale a las calles, Tello, el eterno criticado, resucite para ser clave y diferencial y poner el empate en el marcador. 1-1 y todo por decidir. Pero apareció otro que también ha revivido en el último año y medio en el club bético. Borja Iglesias fue a por un balón que casi nadie creía que llegaría y forzó un penalti que él mismo se encargó de transformar.

¿Qué tiene el gol de Borja Iglesias? Confianza, creer, esfuerzo, pasión. Si volveís unas líneas más arriba del texto, eso es la Fé. El equipo podrá jugar mejor o peor, podrá estar más acertado o menos, pero siempre compite. Esa es la gran alegría de un beticismo, que fue el mejor cortejo que tuvo el equipo en Cádiz. Ellos se encargaron de ponerle la música, los redobles y el sonido de trompetas que acompañaron al Real Betis Balompié en su estación de penitencia en Cádiz.

Ahora, con la satisfacción de que el Betis sigue dando motivos para creer que la Champions es posible, es momento de disfrutar. Disfrutar de nuestras tradiciones, de nuestra cultura. Momento de que la devoción salga a la calle, de volver a emocionarse con nuestras imágenes y que los sentimientos broten tras dos años de culto interno. Nuestro amado Betis vuelve el Viernes Santo y esperemos que haga otra demostración de Fé. Mientras tanto, cofrades a la calle.