Tras una mala temporada llena de malos resultados e inestabilidad tanto deportiva como social, en la presente campaña el Real Betis Balompié de la mano de Manuel Pellegrini ha vuelto a realizar una gran campaña, clasificándose para jugar en Europa por duodécima vez en su historia.
Desde Betis.mobi, analizamos lo que a nuestro juicio han sido las claves de esta gran temporada:
Apuesta por un entrenador constrastado
El mandato de Haro y Catalán, hasta este momento ha estado lleno de más sombras que luces. Si hay una cosa que siempre se le han rebatido es la falta de un entrenador de prestigio que haya dotado a una plantilla de competitividad y ambición por lograr alcanzar grandes objetivos.
Con la llegada del chileno se logró cubrir ese déficit. Aunque al principio llegó entre un mar de dudas por culpa de su edad y de una supuesta falta de hambre competitiva debido sus éxitos logrados en su ya dilatada carrera. Pronto, en tan solo un año, el ingeniero ha logrado resolver esas dudas y ha clasificado de nuevo para Europa, a un equipo que casi desciende con Rubí el curso pasado.
Pellegrini tenía un plan
Esta resurrección bética tiene varias claves. La principal, sin duda, la excepcional gestión que está llevando a cabo su director de orquesta, Manuel Pellegrini. El técnico chileno, en una temporada con pocos refuerzos y todos a coste cero, le ha dado por completo la vuelta a una plantilla que el pasado curso apenas fue capaz de mantener la categoría a duras penas. Bajo su batuta, el Betis sencillamente es otro equipo.
Su idea ha calado en el vestuario. Su método de trabajo, basado en la meritocracia y el rendimiento más allá de los nombres, ha encontrado respuesta en sus futbolistas. Y sus planteamientos previos y las acertadas correcciones que ha llevado a cabo durante los partidos le están dando infinidad de puntos a su equipo.
Sólo los goles logrados en los 15 minutos finales de sus encuentros por los futbolistas que entraron de refresco en los movimientos tácticos del técnico chileno le han reportado 14 puntos al conjunto verdiblanco. Después de unos primeros meses irregulares, Pellegrini ha manejado con maestría a un Betis, convirtiéndolo en un gran competidor, habiendo perdido tan sólo 2 partidos de los últimos 25, alcanzando de forma brillante el objetivo de volver a jugar en Europa.
El dúo de magos
No sólo Pellegrini es la única clave de este renovado Betis. Sobre el verde aparecen jugadores diferenciales. Canales, por ejemplo, fue clave para que el equipo creyera en sus posibilidades. El cántabro, salvo en el tramo final de la temporada donde le ha visto realmente cansado, ha sido la batuta del conjunto verdiblanco. Y eso que su grave lesión en noviembre con la Selección Española hizo pensar que estaría fuera varios meses, pero Sergio, en otra muestra más de compromiso y sacrificio, acortó plazos de recuperación. Y volvió mejor de lo que se fue, anotando 6 goles en 5 partidos y echándose de nuevo el equipo en la espalda. Ha terminado la Liga con 9 goles entre Liga y Copa. Y se ha quedado sin Eurocopa, incomprensible.
El otro mago con el cuenta el cuadro bético es Nabil Fekir, aunque el francés siempre está en el centro del debate. Muchos piensan que debería de aparecer más. Y puede que lleve razón, pero los números del «8» verdiblanco son una locura. Primero en duelos ganados, en regates, en faltas obtenidas, en tarjetas provocadas y el segundo en pases claves. A todo esto hay que añadir que es el jugador que más penaltis provoca, con 10 penas máximas forzadas en temporada y media. Y hay que darles la razón a aquellos que dicen que el galo es intermitente, pero cuando aparece puede ser diferencial, como pasó en el partido contra el Celta.
La mejoría defensiva y la combinación de jóvenes y veteranos
Si hay una cosa que ha conseguido parar Pellegrini desde su llegada, ha sido la sangría de goles en contra. Y eso que el curso empezó con los mismos guarismos que la de otros años, apareciendo el Betis entre los equipos más goleados. Fue entonces cuando el chileno apostó por darle la oportunidad a Víctor Ruiz y Miranda, jugadores hasta ese momento con un papel secundario.
Junto a ellos dos, el mejor Mandi y un Emerson inconmensurable han hecho que la zaga haya completado una temporada de rendimiento notable. Todo esto con la inestimable ayuda de Guido Rodríguez, futbolista clave en el eje del equipo que roba balones, hace coberturas y además juega con orden y criterio
Otros de los aspectos a tener en cuenta es el paso hacía adelante que también se ha producido en el sector más joven de la plantilla. Laínez por fin ha demostrado este año el jugador por el que el Betis pagó 15 kilos. O la irrupción de Rodri, talento puro llamado a ser el futuro del Betis. Tampoco no podemos olvidar el trabajo incansable de Ruibal. Los jóvenes apuntando fuerte, y los veteranos dando la cara, como el recien renovado Joaquín o Guardado.
La resurrección de Borja Iglesias
Si esta temporada ha tenido una nota en clave positiva es la vuelta del mejor Borja Iglesias. El gallego, sobre todo en 2021 ha recuperado la mejor versión de ese delantero por el que el Betis pagó 28 millones de euros. Aquella noche de niebla contra la Real Sociedad en Copa del Rey fue el primer rugido de un «panda» que volvió a conectar su cabeza y su confianza haciendo lo que mejor sabe, meter goles.
Juanmi también se ha sumado a la fiesta con goles importantes. Quizás la nota negativa ha sido Loren, quien no ha vivido un año difícil.
¿Habrá cambiado el Betis esa mentalidad que ha demostrado este año? El siguiente año lo sabremos, pero lo mostrado en este invita a confiar que sí. A poco que se acierte en la planificación y se realicé una venta importante que comienze a recuperar las maltrechas arcas, podemos estar ante una época dorada que haga cambiar el sufrimiento habitual de esta bendita aficion por alegrías cada vez más frecuentes.
