Se me vienen muchas cosas a la mente cuando hay un Real Betis – Valencia en juego. Sin ir más lejos, hace poco estábamos diciendo adiós a la leyenda Joaquín con los chés de rivales. O un año antes, ganando la Copa del Rey en la Cartuja. O si tiramos muchos atrás, en una noche lluviosa de 2013, el Real Betis consiguió remontar un partido perdido con un doblete del de siempre, Rubén Castro, que cortaba una racha de 10 jornadas sin ganar.
Quizás me deje más precedentes importantes con estos dos protagonistas. Pero hay que volver al presente. Y es que el partido que van a disputar béticos y valencianistas tiene también más importante de la que se piensa, sobre todo para los que juegan de local.
Porque en este bendito club, y en su gloriosa afición, las alegrías duran menos que un caramelo en la puerta de un colegio. Es cierto que el equipo de Manuel Pellegrini no marcha bien y que no transmite buenas sensaciones. Pero un traspiés contra el Valencia será suficiente para que en la Jornada 8 se active el modo autodestrucción en Heliópolis. Por lo tanto, la victoria es el mejor bálsamo para salir de una racha de resultados algo inesperada.
Llega el Real Betis tras empatar 1-1 contra el Granada en una nueva actuación de los béticos bastante discreta. El único que puso una nota positiva en ese encuentro fue el canterano Assane Diao. Su debut, con gol incluido le abre de nuevo las puertas de una titularidad merecida. Velocidad, derborde, descaro…este muchacho lo tiene para romperla. Y ojalá contra el Valencia lo haga.
Que un chaval de 18 años sea la «esperanza» de un Betis plagado de estrellas no habla precisamente bien de como está el equipo. Pero jugando bien o mal, la victoria se antoja obligada para apagar un incendio que se puede propagar a límites insospechados. A buen seguro, la vuelta de William Carvalho ayudará a que las cosas mejoren. El luso ya jugó algunos minutos en Granada y contra el cuadro valencianista también disfrutará de minutos.
Al Benito Villamarín viene un «baby» Valencia que está haciendo las cosas muy bien en este tramo de liga. Muchos vaticinaban que los de Rubén Baraja estarían metidos en puestos de descenso, pero el «Pipo» ha tirado de producto de la casa y la apuesta le está saliendo bien. Los Javi Guerra, Diego López o Fran Pérez están liderando a un equipo, que a pesar de su derrota en la última jornada (0-1 vs Real Sociedad), tiene un punto más (10), que los béticos en la tabla.
Si repasamos la enfermería de cada equipo, la lista de lesionados en ambos conjuntos es bastante extensa. Manuel Pellegrini recupera a Bartra pero tiene las bajas de Willian José, Luiz Henrique, Fekir, Sabaly y Guardado. Por parte valencianista, no podrán contar para este encuentro con Gayá, Canós, Jesús Vázquez, Foulquier, Alberto Marí por lesión, y Amallah por sanción. Almeida y Correia son dudas hasta última hora.
Posibles onces
Ricardo de Burgos Bengoetxea será el colegiado de este apetitoso encuentro. El árbitro vasco ya ha pitado esta temporada al conjunto sevillano. Lo hizo en el empate a cero contra el Atlético de Madrid.
Por lo civil por lo criminal, hay que ganar este partido. No será fácil, porque este Valencia, con los recursos que tiene es un equipo ordenado, disciplinado y que se está mostrando muy combativo. Y es básico para vencer, la unión y el compromiso de todos. Durante 90 minutos, hay que dejar rencillas y debates que se leen por redes sociales para crear la atmósfera necesaria para que no se escape ningún punto más del Benito Villamarín. Salgamos de esta mini crisis juntos.
