El Espanyol tiene la pólvora mojada. Ha marcado solo tres goles en los últimos cinco partidos, de los cuales solo ha ganado uno (en copa frente al Cádiz) y ha perdido cuatro en liga (frente al Barcelona y Girona en casa, y contra Getafe y Sevilla a domicilio). No nos dejemos engañar por los últimos encuentros que ha disputado el equipo catalán, pues su gran inicio de temporada nos advierte de lo peligroso que puede ser el Real Club Deportivo Español.
Hay que prestar mucha atención a su ataque pues hay artillería. Actualmente, su referente es Borja Iglesias, pero no debemos dejar atrás a Leo Baptistao y Sergio García (viejos conocidos del equipo verdiblanco).
En el centro del campo encontramos mucha calidad con Darder, Granero, Marc Roca y Hernán Pérez. El equipo verdiblanco tendrá que hacerse con el centro del campo para no pasar apuros con estos especialistas que tendrán como objetivo la portería de un viejo compañero, Pau López. Ya conocemos que Rubi, el entrenador perico, le gusta el buen trato de balón y el juego con posesión, por lo que la lucha por el control de la pelota parece clave para decantar la balanza hacia un extremo u otro.
Sin embargo, el equipo blanquiazul viene mermado en defensa. Su baluarte Mario Hermoso está lesionado por un esguince de tobillo, por lo que Oscar Duarte se postula como su sustituto. Dídac Vilá no estará por acumulación de amarillas. Por lo que la defensa que se puede presentar ante el Betis estaría formada por Javi López, David López, Rosales y el sustituto de Hermoso. Aunque Naldo puede aparecer tras recuperarse de su lesión.
En la portería encontramos un muro complicado de romper, Diego López. No caigamos en la desdicha de creer que nos va a ser fácil marcar por el hecho de que haya encajado tantos goles en los anteriores partidos, es un portero de gran embargadura y lleno de reflejos.
No va a ser un partido fácil para los verdiblancos, recordemos que desde la inauguración del RCDE Stadium en 2009 se han jugado seis partidos en los que los catalanes han ganado cuatro partidos y los andaluces solo uno, y repartiéndose los puntos solo en una ocasión.
