Partido vital en el Nuevo los Cármenes el que afrontaba en la noche de ayer el Real Betis Balompié. Digo vital no por la clasificación en liga, sino por necesitar ese aporte extra de moral que te dá una victoria en este mundo del fútbol.
Plantaba sobre el verde Manuel Pellegrini un once con algunas novedades como Álex Moreno, Bartra y William Carvalho, seguramente 3 de los jugadores más criticados por la parroquia verdiblanca. Sin embargo, el equipo empezó bien, muy bien, con dominio de la pelota y del centro del campo y yendo a por el partido desde el primer minuto. En el minuto 5 Fekir se plantó solo delante del portero pero no pudo batir al guardamenta. En el minuto 12 también la tuvo Tello y así sucesivamente durante los primeros 45 minutos.
El partido era un monólogo y con un guión ya varias veces visto por los verdiblancos. Inumerables ocasiones falladas y con el temor de que a la primera que tuviera el rival se colaría en la portería. No fue así del todo. El Betis cuajó una grandísima primera parte en todos los sentidos, tanto ofensivos como defensivamente.
Al borde del descanso Rodri recibió un balón en banda izquierda que tras una buena conducción y algun que otro amagó suelta el zapatazo para poner el balón casi en la escuadra y lejos del guardameta local. Si la primera parte hubiera acabado 0-3 o 0-4 nadie se hubiera extrañado. Pero esto es el Betis, y con el 0-1 ibamos servidos.
El inicio de la segunda parte fue un calco de la primera. Y desde aquí hasta el minuto 64 el Real Betis
pudo aumentar en varias ocasiones claras su ventaja en el marcador y acabar con un partido en el que el
Granada ni estaba ni se le esperaba. Pero como ya sabemos, el fútbol es caprichoso y ese refran de «quien perdona lo acaba pagando» siempre está presente en los partidos del conjunto de la palmera.
Manuel Pellegrini hizo 2 cambios en el minuto 64. Quitó del terreno de juego a Fekir y a Willian Carvalho,
lo que propició que perdieramos por completo la posición y la posesión en el centro del campo.
Sinceramente no se porqué ese impetu de meter a Camarasa tan temprano porque no tiene ritmo para jugar. Algunos direís que si no juega nunca lo tendrá. Y es verdad, pero cuando el equipo está funcionando a las mil maravillas no creo que se deba tocar. Primero gana el partido de liga y luego piensa en el de Europa del Jueves, y no al revés.
Y eso es lo que le pasó al mister, hizo cambios pensando en el Jueves y dos minutos después en el
primer tiro a puerta del Granada en todo el partido, Luis Suarez soltaba un latigazo por el palo corto para subir el 1-1 al marcador.
De aquí al final del partido, muchas imprecisiones de ambos conjuntos, mucha desubicación de jugadores en ambos conjuntos y mucho cansancio en ambos conjuntos. El partido estaba en una balanza tan sútil al movimiento que el que diera 3 pases seguidos daba la sensación de poder llevarse el partido. Y gracias a dios así fue. En el minuto 88, Sergio Canales agarra en la raya del medio campo la pelota de espaldas a portería, se gira, se va del primero, del segundo, del tercero y hasta del cuarto jugador del Granada gracias a su potente conducción para introducirse en el área y con un soberbio y fuerte tiro cruzado batir al portero local y conseguir subir el 1-2 al marcardor.
El Real Betis mereció golear, pudo empatar y acabó ganando (que no es poco), pero buen harían los jugadores béticos en aprender, de una santa vez, a cerrar los partidos para que no nos sigan dando microinfartos en todos los partidos.
Primera victoria de la temporada, victoria merecida y que sean muchas más. Sigamos confiando en el plan del ingeniero.
Once inicial Granada C.F.: Maximiano; Arias, Duarte, Germán, Carlos Neva; Gonalons, Monchu, Montoro; Soro, Machís y Luis Suárez
Once inicial Real Betis Balompié: Rui Silva; Bellerín, Bartra, Víctor Ruiz, Álex Moreno; Guido Rodríguez, William Carvalho; Rodri, Fekir, Tello; y Borja Iglesias.
Arbitro: Cuadra Fernandez
Amonestaciones: Borja Iglesias, Fekir y Gonalons
