Era el día, pero no fue. El Elche se vistió de villano para estropearle la previa a un beticismo que quería una victoria como despedida antes de la final del sábado. El cuadro de Pellegrini desaprovechó una oportunidad pintiparada para meterse de lleno por la lucha por la Champions. No fue el mejor partido de los verdiblancos, que se encontró a un cuadro ilicitano que metió la única que tuvo, asentando un mazazo que bien le puede valer una permanencia.
La cabeza en otro lado, las rotaciones, falta de intensidad…muchas razones se pueden encontrar para explicar una actuación un tanto desdibujada del Real Betis. Desde el principio se pudo ver que al conjunto hispalense le faltó profundidad, ideas en ataque y una chispa de clarividencia arriba. Para ser justos, el Betis llevó más peligro a la meta de Édgar Badia, pero sobre todo fue con disparos lejanos donde el meta visitante estuvo muy acertado.
En el 20′ el Betis conseguiría adelantarse, pero el gol de Juanmi era anulado por un claro fuera de juego. El malagueño estuvo en casi todas las jugadas de ataque de su equipo, esta vez yéndose sin perforar las mallas. Todo igualado en una primera parte donde el plan del Elche estaba saliendo a la perfección.
En la segunda parte más de lo mismo. Un Betis sin encontrar el hueco y con poca profundidad y un Elche que a medida que pasaban los minutos se lo iba creyendo. Pellegrini dio entrada a Joaquín, Tello o Borja Iglesias, entre todos, buscando el efecto que obtuvo en Cádiz, aunque en este caso la incidencia ha sido mucho menor que en aquel día.
Ya en el tramo final, en el 82′ llegó el jarro de agua fría. Josan, que con fé llega a rescatar un balón que se perdía para ponerlo en el área y encontrar a Tete Morente para hacer el 0-1. Fallo en cadena de la defensa. Mazazo durísimo del que no supo reaccionar. Ni tuvo tiempo, y en este partido no había ideas. Para colmo, al final del partido a Paul se le cruzaron los cables y se autoexpulsó. Una pena porque estaba haciendo un gran partido.
Toca aprender de este tipo de derrotas y que sirva de lección para lo que se viene. Nada más y nada menos que una final de Copa. Tocar plata después de 17 años. Las finales no se juegan, se ganan. Nos lo merecemos.
Real Betis: Rui Silva, Sabaly, Pezzella, Bartra, Miranda (Álex Moreno 81′), Paul, Guardado (Joaquín 57′), Canales, Juanmi (Tello 73′), Fekir (William Carvalho 81′) y Willian José (Borja Iglesias 73′).
Elche CF: Badía, Palacios (Josan 46′), Roco, Verdú (Barragán 59′), Diego González, Mojica (Olaza 71′), Kike (Milla 86′), Gumbau, Raúl Guti, Fidel (Morente 58′) y Ponce.
Goles: 0-1. Morente (82′)
Colegiado: Javier Alberola Rojas, comité de Castilla-La Mancha. Amonestó a Palacios y Badía. Expulsó por roja directa a Paul
