En busca del gol perdido

En busca del gol perdido


La escasez anotadora del equipo verdiblanco no es un hecho, ni es una realidad. Ya se ha convertido en un problema, en un verdadero problema.

Y es que hasta en 9 ocasiones, sumando las tres competiciones, no ha conseguido estrenar el luminoso. 33 goles durante la presente campaña, 21 en liga, 5 en copa y 7 en la Europa League.

Unos números muy pobres para un equipo que quiere estar entre los mejores. Si a eso le sumamos que el máximo anotador es el argentino Lo Celso, aun parece más preocupante.

Y es que entre los tres jugadores que ocupan las demarcaciones de delantero, solo han sido capaces de anotar en 10 ocasiones. En las tres competiciones, Sanabria lleva 5, Loren 3 y Sergio León 2. Con esos números cuesta mucho sumar de tres en tres.

Después de la llegada del mejicano, Diego Lainez, la parroquia verdiblanca anhela un nueve, y parece que no va a ser tarea sencilla. Y es que son muchos los que opinan que el fichaje de un killer del área era muchísimo más necesario que la del jugador azteca.

Está claro que la pieza más cara, sin duda es la del goleador. No es fácil la contratación de un jugador con esa característica. De la forma que últimamente está cerrando las operaciones Don Lorenzo Serra Ferrer, y para aparezca un futbolista así, la única forma posible es tirando de talonario.

Además sin salidas de algún punta verdiblanco, se antoja difícil que pueda llegar otro, serian cuatro para una demarcación que en pocas ocasiones Setién utiliza dos de inicio.

Cualquier tiempo pasado fue mejor

Decir una cosa así, en los momentos por los que pasa el beticismo, puede sonar a locura. Porque ahora que todo parece ir por el camino adecuado, pero el Real Betis Balompié tiene números anotadores muy pobres, y si echamos la vista atrás todos nos acordamos de un nombre. En otra época no tan lejana el cuento era de otra forma. Había un goleador, un tal Don Rubén Castro Martin, que tenía eso que hoy no tiene ninguno, estaba tocado por una varita, y cuando parecía que no estaba, aparecía y hacia su trabajo, hacia lo que mejor sabia, hacia GOL.

¿Os imagináis a este Betis con el mejor Rubén? También me acuerdo del de las botas blancas, de Ricardo Oliveira, de muchos que nos han dado muchas alegrías. Seguro que cada uno tenemos nuestro favorito.