- El Real Betis Balompié tiene esta temporada el reto deportivo y económico de entrar en Champions
Si hay una palabra que se repite en este verano, y en especial en este mercado de fichajes, es el término palanca. Empezamos a escuchar este concepto financiero que tan de moda se ha puesto con las maniobras ejecutadas por el FC Barcelona para aliviar su delicada situación económica.
El término «apancalamiento financiero» consiste en usar mecanismos que permitan aumentar la rentabilidad de una inversión. Gestiones y acuerdos que te pueden llenar la cartera a corto plazo, pero que no dejan de tener un riesgo.
El cuadro verdiblanco también se ha visto obligado a tirar de estas famosas palancas para aumentar su margen de maniobra. En este caso, el club ha decidido vender un porcentaje de los derechos de abonos y ticketing (uno de los activos más estables) para poder inscribir a los fichajes y las renovaciones. El club espera la aprobación de la Liga para activar este mecanismo financiero.
El Real Betis ha tenido que tirar de este recurso ante la imposibilidad de realizar una gran venta que cuadre la economía verdiblanca. Numerosas ofertas han llegado por futbolistas béticos, pero todas se han antojado insuficientes. La dirección deportiva ha apostado por no malvender y no debilitar una plantilla que se ha revalorizado en las últimas dos temporadas.
Muchos consideran que, la activación de esta palanca, sólo solucionaría los problemas béticos a corto plazo. El club está necesitado de ingresos de mayor cuantía, y eso puede llegar si hay una gran venta o un hito deportivo. Si no ocurre lo primero, habrá que intentar la segunda vía. Y aunque suene demasiado exigente y ambicioso, pero entrar en Champions solventaría de un plumazo muchos de los problemas económicos que a día de hoy azotan al club de las trece barras.
Tras venir de una temporada histórica donde se ha repetido clasificación europea y haber ganado un título 17 años después, si algo han recalcado cuerpo técnico y plantilla es seguir dando pasos hacía adelante y seguir creciendo. Por lo tanto, no es descabellado pensar que unos de los objetivos que puede tener el conjunto de Manuel Pellegrini es entrar en la máxima competición europea. Ya el año pasado estuvo a tiro y este año parece obligado lucharla sin descanso. Supondría un reto deportivo, pero tal y como están las arcas verdiblancas, también un reto económico.
Es en la Champions League donde se reparten el «premio gordo» si lo comparamos con la Europa League. La diferencia es abismal. En Champions League, cada equipo percibe de forma fija unos 15,64 millones de euros por participar en la fase de grupos. En dicha fase, el club ingresa 2,8 millones por victoria, 930000 euros por empate y nada en caso de derrota. Una cantidad que habría que sumar más dinero en caso de pasar de ronda, aunque esto si se considera una auténtica utopía.
- Clasificación para octavos de final: 9,6 millones.
- Clasificación para los cuartos de final: 10,6 millones.
- Clasificación para las semifinales: 12,5 millones.
- Clasificación para la final: 15,5 millones.
- Campeón de Champions: 4,5 millones.
A todo esto, habría que añadirle el famoso «market-pool», que es un sistema que destina a cada país una cantida de dinero en función de su valor como mercado televisivo para la Champions. Si esto no fuera suficiente, desde hace un par de temporadas también los clubes ingresa un dinero por el ránking de coeficiente. Esto es, que el equipo con mejor ránking recibe una «cuota» de 1,1 millones. Cuánto mejor ránking, se incrementa dicha cantidad. Y lo que supondría entrar en la mejor competición continental; patrocinios, publicidad…
Si comparamos esto con la Europa League, vemos la gran brecha. Un club que esté clasificado para la fase de grupos ingresa 3,63 millones, pudiendo sumar 630000 por victoria y 210000 por empate. Los campeones de grupo recibirían 1,1 millones de euros y los subcampeones 550000 euros. Si va pasando de rondas, se va ingresando diferentes montantes.
- Dieciseisavos de final: 500.000 €.
- Octavos de final: 1,2 millones.
- Cuartos de final: 1,8 millones.
- Clasificación para las semifinales: 2,8 millones.
- Clasificación para la final: 4,6 millones.
- Campeón Europa League: 4 millones.
Clasificarse para Europa para un club como el Real Betis es fundamental, no sólo como proyecto deportivo, sino por reclamo y atractivo para posibles fichajes. Aunque acometer el reto de clasificarse para la Champions, aún sabiendo que es complicado, sería la mejor palanca para arreglar el desaguisado económico que tiene el club hispalense. Es la opción más complicada sí, pero la que menor riesgo tiene y la que más felices haría a los béticos.
