El Real Betis cerró el 2024 con un empate que sabe a poco. El cuadro de Manuel Pellegrini cuajó un buen encuentro. Es más, si alguien hizo méritos para llevarse la victoria fue el Betis, pero sus problemas de cara a gol lo volvieron a condenar. Esperemos que 2025 empiece con la puntería más afinada.

A continuación, analizamos las claves del partido:
Necesidad de un delantero
Es una verdad, que si este Betis tuviera un «Rubén Castro» o un «Ricardo Oliveira», el equipo tendría más puntos de los que tiene.
Los de Manuel Pellegrini generan muchas ocasiones, sobre todo en casa, pero los delanteros béticos no están nada acertados de cara a portería.
Por un lado está Vítor Roque, un jugador de 19 años con unas condiciones brutales, pero que ahora mismo se atasca cuando tiene que definir. Será un gran delantero, pero ahora mismo es un proyecto. Por otro lado, Bakambu, que tras la lesión que tuvo la temporada pasada parece carente de ritmo, de agilidad y de calidad. Y por último Juanmi, que aunque duela, parece que sus mejores tiempos han pasado.
Un déficit de gol entre unas circunstancias y otras que debe ser solucionada con una inversión en el mercado de invierno en un delantero.
El papel de Lo Celso
En la primera vez que coincidían Isco y Lo Celso, había muchas de ver esa conexión. El argentino se escoró a la derecha, y en la primera mitad le costó participar en zonas de peligro. Ante su falta de participación, se movía al medio, buscó asociarse con Isco pero se acumulaban muchos hombres en la misma zona.
Con la sustitución del malagueño, Lo Celso volvió a su hábitat natural y volvió a brillar, algo que le ha valido para ser elegido MVP del encuentro. Empezó a repartir pases claves a sus compañeros, dejándolos completamente solos, pero no hicieron buenas sus asistencias.
Una pareja, que aunque en su primera vez no se hayan conjuntado a la perfección, necesita tiempo para pulir cosas y brillar.
Penalizar el más mínimo error
El Rayo Vallecano plantó mucha batalla, hasta encontrar su oportunidad y llevarse un empate, que seguro que a ellos le sabe mejor a los béticos. Perraud falla en un control e Isi roba la pelota. El jugador del Rayo no se lo piensa y saca un latigazo imposible para Vieites. Eso es lo que pasa cuando el partido no está sentenciado, que cualquier detalle decanta la balanza.
