La pizarra | Real Betis – RC Celta | Temp. 23/24. La Liga. Jornada 31

La pizarra | Real Betis – RC Celta | Temp. 23/24. La Liga. Jornada 31

Tras cuatro derrotas consecutivas, el Real Betis Balompié se reencuentró con el triunfo. Tres puntos importantes para mantener viva las aspiraciones europeas de un equipo que volvió a girar entorno a Isco.

A continuación analizamos las claves del encuentro:

Primera parte gris y atascada

Todos esperábamos ver a un Betis que saliera intenso desde el minuto 1 tras las cuatro derrotas seguidas y volver al Villamarín, pero no fue así. El equipo, en el primer periodo se le vio atascado, sin mucha movilidad. El Celta estuvo muy cómodo, ordenado y hasta dispuso de alguna ocasión, pero sin acierto. Sólo Isco, y en forma de destellos, intentó algo diferente.

La vuelta al doble pivote

El partido contra el Girona, Pellegrini quiso sorprender con un solo cierre en el medio del campo, y contra el Celta volvió a su esquema habitual, eligiendo como pareja a Guido y Cardoso. Los dos estuvieron formidables en la recuperación y esa presión alta que no permitió al Celta progresar en alguna ocasión.

Si es cierto, que al equipo le puede faltar cierta creación con los dos juntos, pero el equilibrio, la solidez y las ayudas en defensa fueron fundamentales en un partido igualado. Con la entrada de Fekir y Bakambu, incluso subió de nivel el doble pivote.

Segunda parte de superioridad

Pellegrini detectó los problemas del equipo y dio entrada en el descanso a Fekir y Bakambu, y el cambio fue radical. El Betis recuperó chispa, dinamismo y velocidad en ataque, y empezó a generar peligro.

El primer gol del Betis merece destacarlo por como se produce. Es una jugada combinativa que llega a terminar en gol gracias a la profundidad de ambos laterales. Bellerin asiste y Miranda marca. Cuanto se ha dicho que Pellegrini necesita laterales largos, y para muestra el tanto del de Olivares.

El segundo tanto fue el reencuentro de ese Fekir vintage que veíamos antes de la lesión. Pase de fantasía de Isco y el francés, con un recorte y un remate potente veía puerta casi un año después. No andaba bien Fekir en los últimos partidos, pero su entrada contra se notó y mejoró a los verdiblancos.

Isco, otra vez diferencial

Podemos resultar repetitivos, pero cada partido de Isco Alarcón es un obra de arte. Capacidad de crear, peligroso, último pase, magia, compromiso, sacrificio…En el Betis, y por las necesidades, se está convirtiendo en un centrocampista total.

Fue el mejor en la primera parte, aunque estuvo algo errático, pero brilló en la segunda, participando activamente en todo lo peligroso que generó el Real Betis.

La mano de Manuel Pellegrini

Podemos decir que el técnico chileno no estaba en las últimas jornadas tan acertado en sus decisiones. Es más, también podemos mencionar que en un principio, Claudio Giraldez le estaba comiendo la tostada. Pero el ingeniero detectó el problemas y sus cambios en el descanso mejoraron considerablemente el juego del conjunto local. Nuevo golpe en la mesa de un entrenador que en las últimas semanas se había puesto en duda su capacidad y hasta su continuidad.