Vuelve LaLiga, vuelve la pizarra, vuelve el Real Betis más decepcionante posible. ¿Cómo hacer una introducción concisa que resuma todo lo de ayer? Si ni siquiera se tira a puerta no existe ni la posibilidad de marcar, ni la probabilidad de acierto aparece en escena.
Va perdiendo credibilidad este equipo técnico cuando tras tres meses para reflexionar, para madurar en las ideas, errores y otras cuestiones, vemos de nuevo al Real Betis sin pizca de cambios a la vista. Este fue el once que saltó al campo: Joel Robles en portería, A. Moreno por el carril izquierdo, Sidnei en el central izquierdo, Bartra central derecho. y E, Royale ocupó el carril derecho. Medio del campo para Canales, Guido, Fekir y Aleñá. En la delantera, Borja Iglesias. La disposición en el esquema es un 1-4-5-1.
Respecto a cambios, salió del campo Sidnei (46’), Tello (60’), Borja Iglesias (68’) Aleñá (68’) y A. Moreno (77’). En su lugar, respectivamente entraron al césped Feddal, Lainez, Loren, Joaquín y Pedraza. Sólo podemos destacar el trabajo de Lainez, y Pedraza propuso más que la mayoría de sus compañeros en tan sólo un minuto en el campo.
Los goles del Sevilla:
El primer gol lo podemos considerar penaltito, de esos que hay muchos y no se pitan pero en el Pizjuán se pitó.
Respecto al segundo, los de Nervión tuvieron una oportunidad tras corner, y otra, y otra; se hace obvio quien atacó y se sintió cómodo en este partido. Iba hacia la decena de corners lanzados y tras el descanso, desde la pizarra y el trabajo de Lopetegui, los jugadores por fin vieron la facilidad que concedían los verdiblancos en el primer palo. Fue ahí donde se mandó el balón para que cómodamente se prolongara al segundo palo y acabara en gol.
Claves del encuentro:
Mala propuesta del equipo técnico de Rubi y no hubo plan B.
La propuesta no sirvió, el Real Betis nos recordó al peor Betis reciente. Se hicieron muchos pases en medio de la nada y escaseó la producción ofensiva. Lo peor de ello es que los cambios no fueron enfocados a cambiar la situación en excesivo, se insistió en la idea cambiando hombre por hombre, y sólo en la comodidad que otorgaba al Sevilla un dos a cero, se le dejó al Real Betis avanzar un poco más adelante.
Mal versión de la totalidad de los jugadores.
No hay mucho que escribir, vimos una mala versión de la amplia mayoría de jugadores. Sólo mostraron algo diferente Lainez y Pedraza.
¿Podemos considerar que hubo actitud ganadora?
Probablemente no, y es algo que le falta a este Betis desde que se volvió a primera. No se termina de ver raza, hambre de victoria en el ADN. Es un equipo demasiado templado, grisaceo, anclados en la comodidad. Creemos que lo que más le va a doler a los béticos no es el hecho de perder dos a cero, sino de sentir de nuevo la abrumadora diferencia de nivel de los dos equipos. El Sevilla ganó fácil, sensación de nuevo de estar a un nivel completamente diferente, y esto a los directivos del Real Betis debería de escocerle de manera terrible.