Partido importante por la lucha en Europa vivido en la noche del martes en Heliópolis. A los béticos sólo les valía ganar para mantener sus aspiraciones Champions, pero al final sumó un empate que no le sirve de nada. No está mostrando su mejor versión los de Pellegrini, que parece que se le está haciendo larga el final de temporada.
MAL COMIENZO
Volvió el Betis a su versión pobre en los comienzos de los encuentros en lo que últimamente nos viene acostumbrados a ver. Empezó el partido muy similar al de Pamplona del pasado sábado o al de Elche, incapaz de dar dos pases seguidos y de poder salir de la presión rival. Estamos viendo al conjunto verdiblanco, que ante un equipo que le propone un partido con una presión muy alta, sufre mucho. No tiene claridad en la salida del balón y como ya hemos comentado antes no es capaz de combinar. Lo vimos en la tarde del sábado frente a Osasuna y lo vimos el martes por la noche frente a la Real Sociedad, donde el equipo sufrió mucho y solo se mantuvo gracias a una solidez defensiva que no tuvo el sábado.
SALIDA DE BALÓN
Como ya venimos comentando, uno de los problemas principales de esta «mini» crisis bética es la mala salida del balón que se está viendo agravada en los últimos encuentros. Pellegrini metió en el campo a jugadores con buen toque de balón pero hasta el minuto 30 el Real Betis solo era capaz de despejar balones. Tras el descanso con los cambios que efectuó el ingeniero retrasando a William Carvalho, colocando a Ayoze en la media punta y con un Sergio Canales más participativo, el equipo empezó a dominar y a tener bastantes ocasiones para haber sido capaz de llevarse los tres puntos. La falta de puntería hizo que no se pudiera abrir el marcador y que solo se consiguiese un punto insuficiente para las aspiraciones béticas.
FALTA DE GOL
Es una realidad la de que Borja iglesias no pasa por su mejor momento y que no está acertado en los metros finales, quizás por la ansiedad o porque no esté en su punto físico más alto de la temporada. Pero se tuvieron ocasiones, sobre todo en la segunda parte para que el equipo hubiera sumado los tres puntos.
Voy a romper una pequeña lanza en favor a Borja iglesias. No voy a esconderme y voy a reconocer que es una de mis debilidades pero es cierto que a un delantero le pides goles, pero también hay que analizar que el mal momento por el que está pasando el gallego hay que matizarlo con muchas cosas como ya hablamos en pizarras anteriores. El Panda se encuentra muy solo y trabaja demasiado en la pelea y quizás eso le hace no estar tan fino a la hora de la definición y a la hora de la frescura que se le pide a un nueve. No vamos a descubrir que tampoco fue el mejor de los encuentros del bueno de Borja pero también hay que reconocer que el juego del equipo cambió al colocar a un referente arriba y retrasar un poco a Ayoze Pérez.
MIRANDA, EL MÁS DESTACADO
El partido del lateral bético fue muy completo. Estuvo bien en defensa y muy participativo en ataque. En la segunda mitad todo el juego se volcó por su banda, y el de Olivares estuvo presente en las ocasiones más peligrosas de su equipo. Colgó muchos centros, se asoció con éxito con Ayoze y Canales. Sólo faltó la finalización.
BUENA SEGUNDA MITAD
El conjunto bético cambió drásticamente tras el paso por el túnel de vestuarios, aunque hay que ser justo y hay que reconocer que a partir de la media hora ya la balanza se inclinó un poco hacia el lado bético. Se notó mucho la modificación en el medio del campo quitando a Andrés Guardado y retrasando al portugués William Carvalho, que ayudó más en la salida del balón de lo que estaba ayudando el mexicano. También la entrada de Borja retrasando al jugador canario, al que hay que destacar partido tras partido porque está siendo el mejor de los béticos, aunque muchas veces no termina de decidir de la forma más acertada.
En fin, una pena que el conjunto verdiblanco no fuese capaz de ganar a la Real Sociedad, rival directo por Europa, que hace que se deje de creer en Champions y ya se vea como una quimera. Ahora hay que centrarse en cerrar la entrada en Europa porque el final de liga se le está haciendo muy cuesta arriba al equipo del técnico chileno.