Cuando más difícil parecía. Cuando el equipo parecía más debilitado y con menos recursos para competir. Y ante un problema mayúsculo que se había convertido el jugar de visitante. Pues a base de garra, de sacrificio y de competir como un bloque sólido, el Real Betis disipó de un plumazo todas las dudas de la previa y consiguió una victoria de enorme valor.
De esta forma, el cuadro de Manuel Pellegrini rompe una sequía de triunfos a domicilio que duraba 5 meses. Un periodo de tiempo demasiado prolongado para un equipo que quiere repetir clasificación europea.
La victoria se basó en una buena actuación coral de los verdiblancos, pero que se sustenta, sobre todo, en varios nombres propios. En primer lugar, Isco Alarcón, que de nuevo fue el mejor del equipo, entendiendo en cada momento lo que el juego necesita. Contra el Mallorca, esa medular formada por Johnny Cardoso-Altimira funcionó muy bien. El golazo de Sergi, con un bonito golpeo, fue definitivo para hacerse con la victoria. Y por último, el gran partido de Sokratis, que estuvo imperial durante todo el encuentro.
El inicio de partido no fue fácil para los béticos, ya que a los locales les duraba la euforia tras eliminar al Girona y salieron con mucha intensidad, protagonizando las primeras acciones de peligro.
El Betis estuvo serio, aguantó los golpes y poco a poco fue mejorando su posicionamiento y su balance, y fue encontrándose más cómodo en el choque.
En unas de las acciones del Betis donde el equipo pudo estirarse, antes de que acabara la primera mitad, Sergi Altimira conecta un gran disparo desde la frontal que se cuela en la meta de Rajkovic.
El segundo tiempo fue de ponerse el mono de trabajo y amarrar la victoria con uñas y dientes. El Mallorca apretó, quemó todas sus naves, y colgó infinidad de balones al área. Pero ahí se hizo grande la defensa bética, comandada por un gran Sokratis que despejó todo lo que le vino.
Aguantó, resistió y ganó. Un triunfo balsámico, pero que no debe de ocultar una gran realidad; el Betis necesita fichajes.
RCD Mallorca: Rajkovic; Gio González, Nastasic, Raíllo, Valjent (Dani Rodríguez 58′), Lato (Jaume Costa 79′); Samú Costa (Mascarell 36′), Morlanes (Javi Llabrés 79′), Sergi Darder; Abdón Prats y Larin (Muriqi 58′).
Real Betis: Rui Silva; Bellerín, Pezzella (Visus 46′), Sokratis, Abner; Johnny Cardoso, Altimira; Luiz Henrique (Juan Cruz 84′), Isco, Assane Diao (Rodri 46′); y Fekir (Willian José 67′).
Árbitro: Iglesias Villanueva (gallego), con el castellano-manchego Díaz de Mera Escuderos en el VAR. Amarillas a los locales Lato y Jaume Costa.
