- Una auténtica plaga de lesiones está mermando al cuadro verdiblanco durante toda la temporada
La enfermería del Real Betis Baloncesto está a rebosar. Luis Casimiro no gana para disgustos, y en una temporada de nuevo muy complicada, hay que unirle las múltiples lesiones que está afectando y mucho al cuadro bético.
El último en esta larga lista de bajas ha sido Pepe Pozas. El base malagueño, que estaba siendo una pieza muy importante desde la salida de Evans, se ha roto el tendón rotuliano de la rodilla derecha, confirmando así los malos presagios que habían cuando tuvo que retirarse en camilla en el duelo contra Cazoo Baskonia, Una grave lesión que le obligará a pasar por el quirófano y a estar fuera de las canchas unos 9-12 meses.
Las lesiones están siendo un hándicap muy importante en esta temporada. Hace una semana, el club informó que BJ Johnson estaría unos meses fuera por una rotura grado II de la unión miofascial del aductor del muslo izquierdo. Otra baja en el mejor momento del escolta norteamericano.
A consecuencia de una rotura de placa volar de la articulación interfalángica proximal del quinto dedo de su mano izquierda, lleva Luke Fischer más de un mes de baja, poco tiempo después de recalar en San Pablo.
Eulis Báez es otro de los hombres que también le ha tocado pasar por la enfermería. El dominicano sufrió en el mes de Enero una rotura parcial de la fascia plantar del pie derecho, aunque afortunadamente ya ha regresado al equipo.
Y la lista la cerramos con el primer contratiempo serio que tuvo Luis Casimiro, concretamente en la pretemporada. El pivot Yannick Nzosa, uno de los llamados a ser importantes este año, sufrió antes de la competición una rotura del tendón conjunto de los isquiotibiales de su pierna derecha, recayendo tres meses después de la misma lesión, obligándolo a pasar por el quirófano.
A todas estas bajas, hay que unirles también la de jugadores que ya no están como Rodions Kurucs o Georgios Tsalmpouris, que tuvieron sendos problemas musculares que les apartó de la plantilla algunas semanas.
Una larga lista de contratiempos médicos, que está siendo todo un quebradero de cabeza para Luis Casimiro y una salvación, que cada vez surgen más obstáculos para poder conseguirla.
