Crónica | Rayo Vallecano 1 – Real Betis Balompié 1: Contra 12 fue imposible

Crónica | Rayo Vallecano 1 – Real Betis Balompié 1: Contra 12 fue imposible

Al Betis no le han dejado ganar en Vallecas. O al menos, no se lo han permitido. El nefasto arbitraje perpetrado por Alejandro Muñiz Ruiz ha posibilitado que los béticos, con mucho oficio y trabajo, hayan podido rascar un meritorio empate. El partido no permite más análisis que ese. En el Rayo Vallecano – Real Betis, el árbitro ha impedido al Betis competir con las mismas armas que su rival. Una acumulación de errores arbitrales encadenados, uno peor que el anterior, que han hecho que tanto club como aficionados pongan el grito en el cielo.

La expulsión de Álex Moreno, un penalti no pitado por mano de Catena, faltitas sin pintar, la falta de Falcao en el gol del empate, amarillas injustas a los verdiblancos, una falta a Carvalho en el 93 inexistente cuando se quedaba sólo…Y podemos seguir contando, porque seguro que se quedan algunas en el tintero.

Pero contra todo y contra todos, el equipo ha tenido el suficiente empaque para no salir del partido, seguir conectados y seguir compitiendo, y se trae del inexpugnable Vallecas un trabajado empate que corta la racha de dos derrotas seguidas.

Pellegrini alineó a Rui Silva, Bellerín, Bartra, Edgar, Álex Moreno, Guido, William Carvalho, Canales, Fekir, Tello y Borja Iglesias. Juanmi, por una indisposición, se cayó del partido y en su lugar entró Tello, en un partido gris del catalán. El partido empezó bonito, con ritmo y en un ida y vuelta de ambos conjuntos. Ambos equipos quería la victoria y los dos imprimieron mucha velocidad en la primera mitad. En el minuto 33 se rompería el encuentro. Lance entre Isi y Álex Moreno, donde el lateral bético golpea con el pie la cabeza del extremo, que la baja en exceso para controlar el balón. La jugada sigue, y cuando para el encuentro y ve al jugador del Rayo sangrado, el árbitro decide expulsar a Álex Moreno. Incomprensible.

Pellegrini recompuso el equipo dando entrada a Guardado para jugar de lateral izquierdo en detrimento de Borja Iglesias, que salió desesperado ante la actuación arbitral. El gallego fue protagonista en un una jugada donde se pidió penalti por mano de Catena que no se revisó ni nada. No hay que dar lugar a teorías conspiranoicas, pero la cosa canta de lejos.

Aún así, el Betis se rehizo, y en una genialidad entre Canales, Fekir y Bellerín lograrían ponerser por delante. Triangulación entre los tres en el área que el cántabro empuja a la red. Cuando más complicado parecía, el Betis se ponía ponia por delante.

Quedaba toda una segunda parte donde el Rayo achucharía. Y donde se seguiría sufriendo el esperpento arbitral, con un rasero casero donde todas las faltas del Betis eran faltas, y las del Rayo, un «sigan jugando». En el 70′ se rompería la resistencia bética con el gol de Balliu. Un gol, que como han indicado los expertos debería de no haber subido en el marcador, ya que Falcao, al intentar jugar el balón con la cabeza en el suelo incurre en juego peligroso. Una más del árbitro.

Del 70′ en adelante, el guion de partido parecía claro. Un Rayo que buscaría el gol y un Betis que intentaría a la contra cazar alguna y dar la sorpresa. Al final ni una cosa y ni la otra. Y si había algo peligroso, ya se encargaba el señor colegiado en que la acción del Betis no llegara a buen puerto.

Punto que visto lo visto, es de oro, que debe de reforzar al equipo y suponer de motivación para el derbi de Copa. Contra todo y contra todos, este Betis compite siempre.

Rayo Vallecano: Luca Zidane, Balliu, Catena, Saveljich, Fran García, Óscar Valentín (Guardiola 59′), Comesaña, Nteka (Álvaro García 66′), Trejo (Ciss 83′), Isi (Bebé 66′) y Falcao.

Real Betis: Rui Silva, Bellerín, Bartra, Edgar, Álex Moreno, Guido Rodríguez, William, Canales, Tello (Aitor Ruibal 84′), Fekir y Borja Iglesias (Guardado 39′).

Goles: 0-1. Canales (45′); 1-1. Balliu (70′).

Colegiado: Alejandro Muñiz Ruiz, comité gallego. Amonestó a Canales, Guardado, Óscar Valentín y Rui Silva. Expulsó por roja directa a Álex Moreno.