Hoy recordamos a Juan José Cañas

Pocos jugadores hay en la historia del Real Betis Balompié con la trayectoria de Juan José Cañas. Un centrocampista que vivió de todo en el club verdiblanco, que no se dejó una gota de esfuerzo para defender unos colores que formaron, y que siguen presentes a día de hoy en su vida. Una figura emblemática en la década de los 90, que desarrolló casi toda su carrera en el conjunto de las trece barras.

Su figura quizás esté un poco infravalorada para un futbolista que estuvo en el Real Betis Balompié más de 15 temporadas. Algo a la altura de muy pocos, y que demuestra la fidelidad, el compromiso y el amor por el verdiblanco. De hecho, es el segundo jugador, tras Rogelio Sosa, que mayor número de temporadas ha permanecido bajo la disciplina del club.

Si hay un adjetivo que puede definir a Cañas en el Real Betis es profesionalidad. Nació en Rota en 1972, fue un centrocampista sacrificado, poderoso, versátil y vertical, y no exento de calidad. Llegó a los escalafones inferiores de la disciplina bética a los 16 años, y fue parte del equipo campeón de la Copa del Rey juvenil el 24 de junio de 1990, que derrotó por 4-2 al F.C. Barcelona en la final jugada en Albacete.

Su debut en partido oficial con la camiseta del Real Betis se produjo con 19 años, el 20 de noviembre de 1991, en un duelo copero contra el Getafe. Fue titular y disputó los 90 minutos. Once días más tarde, el 1 de noviembre de 1991, jugó su primer encuentro en el campeonato de Liga. Fue en el estadio Benito Villamarín, en un choque disputado por el Real Betis contra el Málaga.

El gaditano había estado alternando el primer equipo con el Betis Deportivo hasta la temporada 92/93, dando el salto definitivo de la mano de José Ramón Esnaola, jugando aquella campaña 11 partidos.

Fue al año siguiente, en la 93/94, y con el equipo hispalense en Segunda, cuando Cañas se hace un fijo en la alineación titular, llegando a disputar 37 partidos y consiguiendo el ansiado ascenso a Primera División, con Serra Ferrer en el banco.

El mediocentro roteño se convirtió en el hombre de confianza de Serra, siendo un jugador indispensable e indiscutible, participando en 29 partidos y siendo clave de la histórica tercera plaza que consiguieron los béticos en la temporada 94/95.

Cañas era con 23 años, el buque insignia del mediocampo del Real Betis, que iría madurando futbolisticamente con el paso de la temporadas. Fue parte esencial de aquel gran equipo con el que disputa la final de Copa de 1997, manteniéndose en la titularidad durante los años posteriores y participando en competiciones continentales como la Recopa o la Copa UEFA.

En la temporada 2000/2001 sería la peor de Cañas en todos los sentidos. Perdió protagonismo en el equipo en una campaña donde tuvo hasta tres entrenadores y que acabó con un descenso amargo a Segunda División. Permanenció en el Betis para afrontar el reto del ascenso, algo que consiguió a la campaña siguiente, recuperando la titularidad y jugando 22 partidos.

En las campañas siguientes, el futbolista verdiblanco fue perdiendo presencia progresivamente, hasta que llegó la 04/05, temporada mágica para los aficionados béticos, clasificándose por primera vez en su historia para la Champions League y consiguiendo la segunda Copa del Rey. Un título que tuvo el honor de levantar el capitán bético a pesar de no haber jugado aquella final.

Abandonó el club de su vida al término de la temporada 2005/2006, y finalizó su carrera deportiva dos años despues en el CD Alcalá, con 35 años.

En total, en el Real Betis disputó un total de 359 partidos, marcando 19 goles, 11 de ellos con el primer equipo.

Tras su retirada del fútbol ha permanecido vinculado a la entidad en distintas etapas y funciones, formando parte en la actualidad de la dirección deportiva del Real Betis.

Juan José Cañas, un hombre de club. Un centrocampista aguerrido, disciplinado y sacrificado, que no se privaba de pisar área cuando tenía oportunidad a pesar de no ser muy goleador. Pero por encima de todo, un emblema del club con una trayectoria intachable.