Marcos Álvarez, el pegamento de la «piña»

Marcos Álvarez, el pegamento de la «piña»

Ha habido muchos protagonistas que han contribuido a la consecución de la sexta plaza y de la clasificación de Europa este año. Serra, Setién, los jugadores…todos ellos han sido los artífices de la buena campaña realizada por el Real Betis. Pero no debemos olvidarnos de una persona cuyo trabajo ha sido fundamental y vital, y es el de Marcos Álvarez, que ve recompensado su trabajo con un contrato vitalicio con el club heliopolitano.

Todos hemos visto esas ya famosas sesiones de activación donde se ven los jugadores en un ambiente distendido y agradable realizando ejercicios y juegos antes de los partidos. No debe de pasar desapercibida la unión y la buena conexión que ha habido entre todos los jugadores desde el principio, y en eso ha contribuido con su profesionalidad y criterio Marcos Álvarez. Su intención no era otra que convertir el grupo en una familia, forjar alianzas y mejorar la adaptación de aquellos que por idioma o carácter son más retraí­dos. Lo ha conseguido y eso se ha visto también en lo deportivo.

Ha llamado mucho la atención el compromiso de toda la plantilla, aceptando los roles y siempre intentando aportar desde la situación de cada uno. Su trabajo en la parcela fí­sica ha sido notable, sacando de cada jugador lo mejor. Todo esto lo ha acompañado con tareas donde ha sido capaz de disminuir la tensión nerviosa y el estrés de la competición, provocando las sonrisas de sus jugadores, y también de todos los que hemos visto sus graciosas sesiones de activación.

El club ha querido premiar su labor con un contrato de forma indefinida con la entidad verdiblanca. Marcos Álvarez ha sido también uno de los protagonistas de la gran temporada del equipo, y esperemos que su profesionalidad y beticismo siga siendo uno de los engranajes para que las cosas sigan teniendo un resultado positivo.