Sólo hay que darse una vuelta por las redes sociales para ver que la afición verdiblanca anda un poco revuelta. Es cierto que el mundo virtual no es una representación real del sentir del beticismo, pero hay que reconocer que este pequeño bache de resultados que está atravesando el equipo ha levantado algunas asperezas.
Asperezas, o el nombre que le queramos dar. Se percibe cierto dramatismo, que este que escribe, ni comparte ni entiende. Lo que hace un mes era armonía, optimismo y euforía, ahora parece que estamos a 5 puntos del descenso y fuera de toda competición. Que el camino que llevaba el cuadro de Pellegrini se ha torcido, por supuesto. Qué es completamente normal, también.
Tras la derrota en la ida de los octavos de final contra el Eintracht de Frankfurt, muchos dicen que hay que tirar la Uefa, que ya no interesa. Qué nos está perjudicando y nos va a pasar factura. «Yo iría a Alemania con los suplentes». «Lo importante es la Liga». ¿Para qué queremos clasificarnos para Europa el año que viene, si va a llegar un punto donde no va a interesar?. Señoras y señores, esto es hacerse grande. Esto es lo que te hace crecer. Jugar cada tres días, competir cada partido, independientemente de la competición que sea. «Pero es que la plantilla no da para tres competiciones». Pues toda la razón. La plantilla es la que es, no ha habido dinero para reforzarla y buscar ahora una solución me parece absurdo.
Manuel Pellegrini, con una plantilla que el 80% es la misma que acabó 15º hace tres años con Rubi, está rindiendo por encima de sus posibilidades. El Betis no tiene una plantel amplio, y entre un calendario tan exigente, ritmo competitivo, cansancio, lesiones y los rivales que también juegan (que a veces se nos olvidan), están haciendo que ahora el equipo esté ridiendo un poco peor. Y digo rendir peor, porque jugar y competir, lo sigue haciendo como el primer día. Debemos de sentirnos orgullosos de que ahora que no están saliendo las cosas, los nuestros sigan defendiendo el escudo que llevan en el pecho con todo lo que tienen.
Y yo no soy mucho de hablar de barcos, pero muchos parecen que se están bajando de él. Y yo me pregunto lo siguiente. ¿Un aficionado de la Real Sociedad, del Athletic Club del Bilbao o del Villarreal, se cambiaba por uno del Betis? Sin dudarlo. A algunos se le ha olvidado que este equipo en mes y medio se juega un título, que ha estado hasta nada tercero en la Liga y vivo en unos octavos de final de Europa League.
Vamos a calmarnos. El fútbol son rachas y todos los equipos tiene altibajos. El Betis, no iba a ser menos. Es la hora de animar (aunque a muchos no le gusta ese cántico, todo lo que sea empujar al equipo aquí hay uno que siempre lo agradecerá) y de estar con los de Pellegrini. El ingeniero, que ahora también se le empieza a discutir levemente su sistema de rotaciones, nos ha hecho soñar después de años de penurias y decepciones.
Estamos en medio de una temporada que es histórica. Se le pide al equipo gestionar esta minicrisis, pero también aprendamos a hacerlo nosotros. Sigamos unidos. Sigamos juntos. Este equipo se lo merece, Nosotros nos lo merecemos.
