En mi artículo anterior (https://www.betis.mobi/articulo-de-opinion-borrasca-en-heliopolis/) vaticinaba la llegada de un temporal a las oficinas de Heliópolis, no me equivoqué. Lo que no me imaginaba es que el apogeo del huracán fuera a llegar tan pronto y con consecuencias tan devastadoras.
Ayer al mediodía, el actual presidente del Real Betis Balompié concedió una entrevista en una conocida radio local. Tuve el placer, o el horror, de escucharla en directo.
El placer porque soy de los que piensa que para opinar sobre algo, es mejor haberlo vivido (en este caso escuchado) por uno mismo. El horror, por todo lo demás.
Se notaba algo más que nervioso al Señor Haro con cada una de las preguntas a las que era sometido por los periodistas, y más nervioso aún, cuando contestaba a éstas. No tuvo miramientos en hablar varias veces de lo fundamental que era la lealtad entre los miembros del consejo.
No voy a entrar en todas las declaraciones, si las quieren conocer en profundidad las tenemos en este enlace (https://www.betis.mobi/guerra-en-el-sillon-de-heliopolis/)
En lo que si voy a entrar es en el análisis del trato que se le está dando a una de las leyendas, o como algunos llaman, barras del escudo de nuestro club. Comprendo que Haro tenga que defender a capa y espada a la pareja de baile con la que consiguió alcanzar la presidencia del Real Betis. Comprendo que tenga que guardarle lealtad por haberlo ayudado a alcanzar el palco del Villamarin. Comprendo que lo haya intentado quitar del foco de las críticas cuando todos sabíamos quién era el culpable. Lo que no puedo llegar a comprender es como es capaz de anteponer la lealtad personal sobre la lealtad al Real Betis Balompié.
Si, el señor Haro está siendo desleal con el club al que supuestamente tanto ama, y digo supuestamente porque si de verdad fuera así, el encargado de la parcela deportiva la temporada pasada, que no solo deportivamente fue un fracaso sino económicamente un desastre, hubiera estado buscándose otra ocupación el día siguiente al que acabó la liga pasada.
Algunos, con razón, diréis: ¿Cómo va a echar del club a quién le puso donde está? Pues muy sencillo, el presidente del Real Betis Balompié DEBERÍA QUERER lo mejor para el club, y ha sido constatado más que de sobra que el trabajo del señor Catalán es digno de cese fulminante. Por lo tanto, si de verdad tuviera lealtad al Betis hace tiempo ya que este señor debería haber estado fuera del club. Y no porque lo diga yo, si no porque hay 200 millones de razones que me respaldan.
Y no se conforman con eso, sino que además, cualquier persona del bando del actual consejo de administración no deja pasar ni una oportunidad de desprestigiar a una de las barras del escudo. Hablo de Lorenzo Serra Ferrer, por supuesto.
Ayer se filtraron los famosos folios con los que despidieron al de Sa Pobla, que por cierto, no sé si lo han escrito profesionales o mi sobrino de 2 años y medio en un ataque de celos con alguno de sus compañeros de guardería. Esos folios dejan más aún en evidencia que la salida de Serra del Betis no fue otra cosa que un combate de orgullos en el que el vencedor fue el señor Catalán, ni desavenencias profesionales, ni falta de profesionalidad ni ninguna de las patrañas que nos quisieron vender, simplemente orgullo. Otro motivo más para pensar en la deslealtad de estos dirigentes hacia el club.
Podría escribir mucho sobre este tema, pero me parece insuperable lo acontecido en la entrevista que les nombraba al principio del artículo. El Señor Haro, en otro ataque de desprestigio ha comparado a Lorenzo Serra Ferrer con copito de nieve, tal cual, copito de nieve. Manifestaba que la Junta de 2017 la hubieran ganado de calle aunque en vez de Serra, su director deportivo hubiera sido el famoso gorila.
Ya no es que sea pisotear y una falta de respeto a Serra, es que es pisotear y faltar el respeto a los béticos, al Real Betis Balompié y a su historia.
Haro demuestra una vez más una lealtad encomiable a su amigo, algo loable en cualquier otro ámbito de la vida, pero no en un club de FÚTBOL. Que no se le olvide señor presidente sobre quién está vertiendo usted tantas y tantas, a mi parecer, desafortunadísimas declaraciones, Lorenzo Serra Ferrer es una leyenda viva e historia de nuestro club, es una barra de nuestro escudo le pese a quien le pese, y recuerde señor presidente, usted primero debe lealtad al Real Betis Balompié.
